La Unidad de Trabajo Social de los Hospitales Universitarios Virgen Macarena y Virgen del Rocío ha atendido a más de 7.000 pacientes y familiares en el último año por sospecha de riesgo social o por sufrir problemas sociales que agravan su enfermedad. En concreto, un total de 5.264 personas han sido asistidas en primera consulta y otras 2.171 en consultas de información solo el año pasado.
Las trabajadoras sociales son el enlace entre el sistema sanitario y el resto de sistemas de protección social y la comunidad. Analizan, evalúan y tratan los factores sociales que condicionan la salud del paciente, y cómo repercute la enfermedad en su área personal, familiar y social. El objetivo es que el usuario sepa adaptarse y superar las dificultades que haya originado su patología antes de recibir el alta médica.
Así, estas profesionales han realizado 12.103 consultas de seguimiento individual o con familiares para el tratamiento social de los pacientes. Además, han realizado 14.614 intervenciones coordinadas con los servicios sociales especializados de la ciudad, con idea de seguir dando respuesta a las necesidades socio sanitarias de la ciudadanía más allá de su paso por los hospitales. Además, han efectuado otras 7.048 actuaciones junto a las trabajadoras sociales de los centros de salud de Sevilla.
En la actualidad, la Unidad de Trabajo Social dispone de cuatro puntos de atención en el Hospital Virgen del Rocío (en el Hospital General, Hospital de Rehabilitación y Traumatología y Hospital Infantil) y otros seis puntos en el Hospital Macarena (planta sótano, planta baja, cuarta planta, Policlínico y San Lázaro).
Tres líneas de intervención prioritaria
La Unidad de Trabajo Social de los Hospitales Universitarios Virgen Macarena y Virgen del Rocío, coordinada por Agustina Hervás, ha adoptado tres líneas de trabajo específico. La primera de ellas es la intervención social con adultos, que incluye programas como la intervención social en las unidades de media o larga estancia y la planificación del alta hospitalaria para proporcionar una adecuada vuelta a la comunidad; la intervención social en cuidados paliativos y hospitalización domiciliaria ante el proceso de la muerte; la intervención social en Neurociencias y Urgencias; el seguimiento de los pacientes diagnosticados de tuberculosis; y la emisión de informes que avalen la idoneidad de inclusión de las personas en el programa de trasplante de donante vivo.
Además, trabajan en otra línea de Intervención Social con Mujer e Infancia, centrada en la aceptación de los diagnósticos adversos y las sospechas del maltrato. La línea de Intervención Social en Salud Mental, por último, favorece la atención biológica, psicológica, social y la reinserción de estos pacientes desde los diferentes dispositivos (las unidades de agudos, las unidades de rehabilitación, las comunidades terapéuticas, y la Unidad de Salud Mental Infantojuvenil).
Voluntariado y asociaciones
Las trabajadoras sociales que prestan servicio en los Hospitales Virgen Macarena y Virgen del rocío son, de este modo, el enlace entre el sistema sanitario y el resto de entidades responsables de la protección social comunitaria. Por ello, colaboran además con más de 277 voluntarios y 25 asociaciones u organizaciones vinculadas en diversos programas sociales que incluyen desde el acompañamiento del paciente que está solo durante su ingreso o su tratamiento, la organización de actividades de entretenimiento para los menores hospitalizados, o la posibilidad de ceder una manutención básica y alojamiento a familias de otras provincias y sin recursos que han de pasar largas temporadas en el hospital.
La labor que realiza la Unidad de Trabajo Social Sanitaria se integra en la cartera de servicios del Sistema Nacional de Salud y está promovida desde el Plan de Responsabilidad Social Corporativa de los Hospitales Virgen Macarena y Virgen del Rocío. Este plan se inició en 2013 para priorizar diferentes líneas de trabajo que fomenten las relaciones con los principales grupos de interés de los centros, como son la ciudadanía, las entidades colaboradoras, los profesionales y el entorno sanitario.
La Unidad cubre las tres áreas de intervención del Trabajo Social como disciplina: Trabajo Social Individual o de Caso, Trabajo Social de Grupo y Trabajo Social Comunitario, todas ellas interrelacionadas entre sí y no excluyentes. El trabajador social sanitario es imprescindible para que el sistema sanitario pueda proporcionar una verdadera atención integral a la salud de la población. La atención integral es el resultado de la intervención interdisciplinar en donde los aspectos sanitarios y sociales son tratados por profesionales especializados, tanto en uno como en otro caso.`