La Unidad de Calidad supervisa las estrategias y medidas implementadas para fomentar la seguridad del paciente controlando desde su medicación y efectos adversos a la higiene de manos de los profesionales, entre otras
El Hospital Universitario Virgen del Rocío ha implantado con éxito una decena de medidas a favor de la seguridad del paciente en sus centros, que mañana celebra su Día Mundial. De hecho, todos los años monitoriza y publica sus resultados en su memoria de actividad del hospital, que se puede consultar en el siguiente enlace: https://hospitaluvrocio.es/memoria17/
La Unidad de Calidad del centro, integrada por personal médico, enfermero y técnico, coordina y supervisa todas las iniciativas que se han puesto en marcha en esta área. En concreto, la Estrategia de Seguridad del Paciente prevista para los años 2015 y 2020, que permite identificar las buenas prácticas implementadas, así como las potenciales áreas de mejora. Además, se evalúan los indicadores de calidad de pacientes ingresados (IQI) y de indicadores sobre la seguridad de los pacientes (PSI) de la Agencia Americana de Calidad (AHRQ). Esta iniciativa contribuye a identificar puntos fuertes y debilidades en la asistencia sanitaria prestada en determinados procesos asistenciales.
El control y seguimiento de las infecciones nosocomiales adquiridas por el paciente durante el ingreso, por otro lado, ha bajado a mínimos gracias al esfuerzo de los profesionales de todo el hospital. Asimismo se analiza de la prevalencia de las úlceras por presión con una periodicidad trimestral por los miembros que componen la Comisión de Heridas, o el cumplimiento de los listados de verificación quirúrgica, que se ha observado muy alta gracias a auditorías semestrales.
Igualmente, se mantienen auditorías sobre la conciliación de la medicación al ingreso del paciente, y se notifican incidentes que manifiestan los pacientes o los profesionales. Por ejemplo, los eventos adversos no relacionados con la medicación, los que sí son efectos secundarios a los fármacos, las caídas, errores, incidentes de bioseguridad o la declaración de enfermedades obligatorias EDO.
Existe también un Plan de monitorización de Indicadores de Calidad y Seguridad del Paciente, sobre el cumplimiento de las historias clínicas, consentimientos informados, la identificación del paciente, la administración segura de la medicación, control de medicación y fungibles o productos sanitarios, la revisión de la composición y mantenimiento de los carros de paradas, la medicación LASA (Look Alike-Sound Alike) y Medicación de alto riesgo, así como estudios observacionales de higiene de manos.
Todas estas actividades las ha puesto en valor el director gerente del hospital, Manuel Molina, en el el primer Foro organizado por la Sociedad Española de Directivos de la Salud (SEDISA), que se ha celebrado la semana pasada con motivo del Día Mundial de la Seguridad del Paciente.