Cardiólogos intervencionistas del Hospital Universitario de Valme junto a cirujanos cardiacos del Hospital Virgen del Rocío han puesto en marcha un proyecto colaborativo en red que permite optimizar la accesibilidad de los pacientes cardiacos de alto riesgo del área sur de la provincia. Esta cooperación intercentros ha hecho posible que Valme recupere en su cartera de servicios la técnica del implante de válvula aórtica transcatéter (TAVI), agilizando los tiempos de espera y evitando la movilidad de los pacientes y profesionales hacia otro centro.
La estenosis aórtica degenerativa es la valvulopatía más frecuente en el mundo occidental y su prevalencia va en aumento como consecuencia del incremento de la esperanza de vida de la población. Es una patología con una elevada mortalidad, siendo necesaria para su tratamiento la sustitución de la válvula aórtica. Aunque el tratamiento de elección es el recambio valvular mediante cirugía cardiaca, no siempre es posible realizarlo en todos los pacientes. Se excluyen aquéllos con alto riesgo quirúrgico o con contraindicación para cirugía.
La alternativa para pacientes que no pueden someterse a una cirugía abierta convencional por su fragilidad es el TAVI. Consiste en un abordaje percutáneo, cuya menor agresividad favorece la recuperación de paciente y reduce las complicaciones asociadas a las grandes incisiones en el tórax.
Al respecto, el servicio de Cardiología del Hospital Universitario de Valme dispone de amplia experiencia en este procedimiento, habiéndolo desarrollado en su Unidad de Hemodinámica desde 2010 hasta 2016. Durante este período se beneficiaron 54 pacientes con unos magníficos resultados. Sin embargo, en los últimos tres años, la dinámica establecida ha sido la realización de TAVI en las instalaciones del Hospital Virgen del Rocío por parte de cardiólogos intervencionistas y enfermeros especializados en dicha técnica del Hospital Valme. Al tiempo que los profesionales, los 78 pacientes del área sur de Sevilla que se han precisado esta técnica han tenido que desplazarse al Hospital Virgen del Rocío con el consiguiente crecimiento del flujo de pacientes para ser intervenidos en el servicio de Cardiología de allí.
Mejora de la capacidad asistencial en Sevilla para el tratamiento de la estenosis aórtica severa
El proyecto puesto en marcha en Sevilla supone una innovación organizativa que redunda en la mejora de la capacidad asistencial para el tratamiento de la estonosis aórtica severa en la provincia. Esta cooperación intercentros, nacida desde los profesionales, ha hecho posible ordenar la actividad en torno al TAVI en un hospital con experiencia en esta técnica; pero que, sin embargo, no dispone en su cartera de servicios de cirugía cardiaca.
Así con el equipo multidisciplinar creado, formado por cardiólogos intervencionistas de Valme y cirujanos cardiacos del Virgen del Rocío, se ha podido recuperar un servicio en beneficio de la accesibilidad ciudadana y garantizando su desarrollo con los estándares adecuados de calidad y seguridad.
Este proyecto colaborativo en red ya está funcionando, habiéndose intervenido el primer paciente con un resultado exitoso. La previsión asistencial es la intervención de en torno a 20 pacientes de alto riesgo, considerados no operables, cada año en el hospital de Valme.
Al respecto, los profesionales de ambos servicios hospitalarios han expresado su satisfacción por el alto grado de colaboración percibido y la agilidad conseguida en el trabajo en equipo. Una valoración muy positiva, refiriéndose al proyecto como la mejor vía posible para hacer una oferta sanitaria con los mejores medios, las máximas garantías y rentabilidad de recursos.
En este sentido, Francisco Javier Molano (jefe del servicio de Cardiología del Hospital Universitario de Valme) y José Miguel Borrego (jefe de Cirugía Cardiaca del Hospital Virgen del Rocío) coinciden en calificar de imprescindible “el trabajo conjunto entre cardiólogos intervencionistas y cirujanos cardiacos para el nuevo abordaje del tratamiento endovascular de la patología cardiaca”.