El cantante Javier Labandón, conocido como El Arrebato, ha representado este año al Cartero Real de sus Majestades los Reyes Magos de Oriente. Profesionales de distintas categorías del centro, han organizado con mucho cariño este acto, un clásico ya en el hospital y los barrios colindantes de Heliópolis y Bami.
Como todos los años, la comitiva ha partido a las 10.30 de la mañana del Hospital Duques del Infantado con una divertida cabalgata que finaliza a las puertas del Hospital Infantil, donde el Cartero se ha presentado y ha recogido las cartas y las ilusiones de todos los niños. El Arrebato ha ido en la Carroza de la Salud acompañado por la Policía Nacional a caballo, la comitiva de beduínos a pie, el Escuadrón de Caballería Beduína de la Puebla del Río, la Banda de Tambores Infantil de la Puebla del Río, la Agrupación Juvenil Santa María Magdalena de Arahal, y una patrulla de personajes de Stars Wars de la Asociación HOLORED.
El cortejo ha pasado a saludar a los usuarios, pacientes, familiares, profesionales y vecinos que lo esperan a las puertas de los centros del campus del Virgen del Rocío. Una vez en el Infantil, el Cartero ha leído el mandato de los Reyes Magos.
Al término, se ha trasladado al salón de actos del Hospital de la Mujer para recoger las primeras cartas al son de la tuna de Empresariales y, posteriormente, a las escuelas hospitalarias y a las habitaciones de los pequeños que no puedan desplazarse.
El próximo 5 de enero, está previsto que los Reyes Magos y la Estrella de la Ilusión del Ateneo de Sevilla visiten a los más pequeños en el Hospital Infantil una vez concluya la tradicional Cabalgata de Reyes por las calles de Sevilla.
Ese mismo día, sobre 10 horas, sus Majestades de Oriente visitarán a los pacientes ingresados en el Hospital General y el Hospital de Rehabilitación y Traumatología. Sobre las 20 horas irán al Hospital de La Mujer. Estas comitivas la integran profesionales de la dirección médica, de enfermería y del área de gestión y servicios, que todos los años tratan de repartir risas e ilusión entre los pacientes, ya sean adultos o niños, que tengan que permanecer la Navidad ingresados en el hospital.