Virgen del Rocío consigue una tasa de corrección superior al 90% en pies zambos

Publicada el: 2009-11-16 12:00 | Escrito por Úrsula Palmar Gómez

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La Unidad de Traumatología Pediátrica del Hospital Infantil Virgen del Rocío aplica con éxito el método Ponseti en el pie zambo (conocido en términos médicos como pie equinovaro), una deformidad congénita que produce el giro hacia dentro de los pies del recién nacido y que, de no ser tratada correctamente, provoca fuertes dolores e incapacita para la marcha. Hasta 50 niños reciben anualmente en el hospital sevillano este tratamiento, que consigue una tasa de corrección superior al 90%.


Con el fin de compartir los resultados obtenidos en los últimos cinco años por el equipo de traumatólogos pediátricos de Hospitales Universitarios Virgen del Rocío, el centro ha organizado el III Curso teórico-práctico del tratamiento del pie zambo con el método Ponseti, en colaboración con el Hospital Universitario Sant Joan de Déu de Barcelona. Expertos nacionales e internacionales debatirán hoy y mañana sobre la aplicación de este método que, en palabras del doctor Francisco Javier Downey, director de las jornadas junto a la doctora Anna Ey, ha supuesto un antes y un después en el tratamiento de los pequeños con esta deformidad. Es un tratamiento cómodo, rápido y eficaz, aclara.


Con varios enyesados y manipulaciones, los especialistas consiguen enderezar los pies sin necesidad de realizar una cirugía agresiva. La única intervención quirúrgica que exige es menor (la tenotomía, que persigue corregir el equino con un pequeño corte en el tendón de Aquiles), por lo que se suele realizar en las propias consultas, con anestesia local. Los especialistas recomiendan comenzar el tratamiento del pie zambo lo antes posible tras el nacimiento. Los yesos van corrigiendo la deformidad progresivamente, siendo necesario realizar entre 5 y 8 enyesados durante los aproximadamente dos meses que dura el tratamiento. Posteriormente, se recomienda el uso permanente de una férula abductora que mantiene la corrección conseguida durante los 2-3 meses siguientes al último enyesado. Pasado este tiempo, dicha férula debe utilizarse durante la noche hasta los cuatro años de edad.


La sencillez y el bajo coste de esta técnica hacen que sea el tratamiento de elección exportado a países en desarrollo, donde esta deformidad es muy común. En este sentido, el hospital sevillano está trabajando en un proyecto de formación específica para médicos del continente africano.