Hospitales Universitarios Virgen del Rocío ha recibido estos días la acreditación del programa de sesiones clínicas de dos importantes servicios, la Unidad de Gestión Clínica de Endocrinología y Nutrición y la Unidad de Gestión Clínica de Hematología y Hemoterapia. Los primeros, han recibido el certificado de calidad en la formación continuada del personal médico, mientras los segundos lo han hecho en el del personal de enfermería. En ambos casos, se han valorado positivamente los esfuerzos realizados en la selección de los contenidos, la metodología empleada, la capacitación de los docentes y los aspectos relacionados con la planificación y los recursos.
Tanto en el programa médico como en el de enfermería, los contenidos están orientados a la actualización y desarrollo competencial de los profesionales, permitiéndoles actualizar y profundizar en aquellos conocimientos, habilidades y actitudes que guarden relación con las buenas prácticas en sus respectivas disciplinas.
En el caso de Endocrinología y Nutrición, los médicos buscan reducir la variabilidad en la práctica clínica, al mismo tiempo que se plantean objetivos específicos relacionados con el aprendizaje y actualización diagnóstica y terapéutica (aplicando a la práctica diaria las bases de la atención sanitaria basada en la evidencia, la epidemiología clínica y los estándares de calidad internacionales). De igual modo, la sesiones sirven para poner en valor el trabajo en equipo, la interdisciplinariedad, una actitud de aprendizaje y mejora continua y un pensamiento reflexivo y crítico entre este colectivo. La sesiones clínicas se realizan dos días a la semana, incluyendo casos clínicos, sesiones conjuntas con la Enfermería, sesiones de actualización y revisión, sesiones bibliográficas, de gestión clínica y de investigación.
El programa de formación de las enfermeras que atienden la planta de hospitalización de pacientes adultos en Hematología y Hemoterapia, primero acreditado en Andalucía en el área de Enfermería, incluye sesiones teórico-prácticas que inciden especialmente en las buenas prácticas relacionadas con el aprendizaje y mejora continua, la adecuación de los planes de cuidados vigentes mediante metodología enfermera y la continuidad asistencial y personalización de los cuidados en varias patologías (trasplante de médula ósea alogénico emparentado, trasplante de médula ósea autólogo, mieloma múltiple, linfoma No Hodgkin y leucemia mieloblástica aguda).