Profesionales del Hospital Universitario Virgen del Rocío, la Empresa Pública de Emergencias Sanitarias-061 y miembros del Cuerpo de Bomberos de Sevilla han sentado hoy las bases para la creación de un protocolo común de asistencia al paciente quemado, lo que sería el primer documento de estas características a nivel estatal. En el marco de la ‘I Jornada Científica sobre Actualización en el Manejo del Paciente Quemado’, celebrada hoy en el centro sevillano, unos 300 profesionales sanitarios y no sanitarios se han dado cita para consensuar el abordaje de estos pacientes en la denominada ‘hora cero’, es decir, los primeros momentos tras haberse producido el accidente.
«Una asistencia precoz y especializada en aquellos pacientes afectados por grandes quemaduras es clave para garantizar un buen pronóstico de los mismos y disminuir las secuelas de lo ocurrido», han coincidido en señalar los organizadores de este encuentro, José María Domínguez, jefe de sección de Cuidados Críticos y Urgencias de Virgen del Rocío, Francisca Miralles, coordinadora de la Unidad de Quemados, Francisco Bonilla, coordinador de EPES en Sevilla y César Pinto, jefe de la sección sanitaria de Bomberos del Ayuntamiento de Sevilla.
El protocolo contempla todos los pasos a seguir en las diferentes fases del proceso asistencial, desde que el paciente es asistido en el lugar del accidente, hasta que llega al hospital, donde puede ser ingresado en la UCI, de precisar ventilación mecánica, o en la Unidad de Cirugía Plástica y Grandes Quemados, una de las cinco acreditadas a nivel nacional por el Ministerio de Sanidad para asistencia a pacientes quemados críticos. De este modo, la coordinación entre los diferentes equipos que intervienen en la cadena asistencial se encontrarán coordinados y actuarán bajo unos mismos parámetros de calidad y evidencia científica.
El documento también recoge los escenarios y la identificación de riesgos en los incendios o la interacción con los primeros intervinientes en este tipo de situaciones para acordar las condiciones de seguridad necesarias, tanto para los equipos sanitarios como para los pacientes que son atendidos.
La Unidad de Cirugía Plástica y Grandes Quemados del Hospital Universitario Virgen del Rocío atiende 1.500 urgencias de pacientes con quemaduras al año, lo que genera hasta 250 ingresos y más de 200 intervenciones quirúrgicas en dicha unidad. Los pacientes proceden de cualquier ciudad andaluza, pero también de otros puntos de España, como Ceuta, Melilla, Canarias o Extremadura. Cuando los pacientes más complejos precisan tener asistencia respiratoria en las primeras horas de su atención son ingresados en la Unidad de Cuidados Críticos, que recibe anualmente hasta 35 pacientes quemados con pronóstico crítico.
En cuanto a los equipos de emergencias sanitarias del 061 en Andalucía han asistido por quemaduras a 241 personas en los últimos dos años, siendo necesario el traslado por vía aérea a través de los helicópteros sanitarios del 11,2% de los afectados. El resto de los pacientes fueron asistidos y derivados a los centros de referencia a través de las unidades móviles terrestres. Por provincias, los pacientes quemados que han requerido la intervención de los servicios de emergencias han sido 13 en Almería, 28 en Cádiz, 21 en Córdoba, 14 en Jaén, 17 en Granada, 12 en Huelva, 43 en Málaga y 96 en Sevilla.
Los incendios con víctimas representan el 30% de las actuaciones del Servicio de Extinción de Incendios sevillano, siendo mayor el número de personas intoxicadas por inhalación de humo que por grandes quemaduras.
La intervención debe ser siempre inmediata, con el fin de realizar una evaluación exhaustiva y determinar las patologías de los afectados y su notificación entre los diferentes niveles asistenciales. En este sentido, importante es el manejo en las primeras horas de las intoxicaciones por humo que conllevan intubación de la vía aérea del paciente para asegurar una óptima ventilación.